«Como en España no se vive en ningún sitio», escucho con demasiada frecuencia. No me interesa la veracidad de esta afirmación –indemostrable-, sino el grado de obscena complacencia con la que alguien la pronuncia y, por supuesto, la inevitable circunstancia de fruición gastronómica que la acompaña.
lunes, 21 de mayo de 2007
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario